La Unión Europea ha dado un paso significativo en la regulación del etiquetado de la miel. Esto se debe a la aprobación de nuevas normas destinadas a reforzar la transparencia en el sector y combatir la adulteración. Hoy, en el blog de El Colmenar de Valderromero hablamos sobre la nueva normativa de la UE para el etiquetado de la miel. Unas normativas acordadas entre el Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión Europea y buscan garantizar que los consumidores tengan acceso a información clara y precisa sobre la miel que adquieren.
Nueva normativa de la UE para el etiquetado de la miel
Una de las principales medidas adoptadas es la obligatoriedad de incluir en el etiquetado de la miel información detallada como el nombre del producto, el país de procedencia y la lista de ingredientes.
Si procede de varios países, se indicará en la etiqueta en orden decreciente de peso, y el porcentaje que representa cada uno. En el caso de la miel monofloral, podrá seguir indicando solo el país de origen y la flor de la que proviene.
Esto permitirá a los consumidores conocer con exactitud la calidad y origen del producto que están adquiriendo. Dicha transparencia es fundamental para evitar la comercialización de mieles adulteradas que puedan engañar a los consumidores.
Al mismo tiempo, la información sobre el origen deberá figurar en el mismo campo visual que el nombre del producto, de forma clara, legible y visible.
Además, las normas acordadas establecen que las mieles exportadas fuera de la Unión Europea deberán cumplir con los mismos estándares de transparencia.
Así, establecerán investigaciones precisas para detectar posibles adulteraciones, como la incorporación de azúcar durante su producción. Estas medidas garantizan que las mieles importadas cumplan con los mismos requisitos de calidad y trazabilidad que las producidas en la UE.
Las marcas tendrán un periodo, todavía sin determinar, para adaptar su etiquetado a la normativa.
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